domingo, 29 de septiembre de 2013

Por fin llego el otoño.

Después de un verano larguisiiiiimo y calurosiiiimo en el que mis árbolitos y un servidor hemos padecido, recibo al otoño con muchas ganas de trabajar y pasar horas y horas disfrutando de esta apasionante afición. Que ganas tenia de cambiar las chanclas, las bermudas, y los dichosos 40º por los pantalones del chándal y el forro polar...je je. Perdonadme pero.... !!!ODIO EL VERAAAAANO!!!

Dicho esto, el pasado lunes me puse manos a la obra y estuve alambrando y rediseñando un pequeño pino parviflora que compré hace unos cuantos años.  Muchas veces con material modesto también se pueden hacer cosas bastante interesantes.